HISTORIA DE LA EMPRESA
La historia de la Planta de Manlleu nace con la constitución de Conductores Eléctricos Roqué, S.A. en Agosto de 1923, fundada por el industrial Francisco Roqué y Parladé, con el objetivo de fabricar y comercializar cables eléctricos, así como compuestos químicos para aislamientos. Durante su larga trayectoria se ha visto envuelta en numerosos problemas que mediante una fe ciega en su continuidad se han logrado superar. Uno de los hechos principales se produjo el día dieciocho de Octubre de 1940, la fábrica fue destruida por las desbocadas aguas del río Ter, afortunadamente la planta había sido desalojada en previsión del desastre. El incidente, a pesar de su gravedad, no desanimó al industrial, sino que le inculcó valor para levantar nuevas instalaciones en el barrio de Gracia, más alejado del río que tanta desgracia le había ocasionado. Durante los siguiente años, Conductores Eléctricos Roqué tuvo un desarrollo espectacular hasta el punto de conseguir que empresas multinacionales prestasen atención a su trayectoria.
En el año 1971 la multinacional inglesa BICC decide apostar por la compañía y adquiere un paquete de acciones, pasando a formar parte de la Sociedad. Desde entonces y potenciada por el capital aportado por BICC, la planta crece y se desarrolla de una manera espectacular, no solo con inversiones en maquinaria y tecnología, sino con la instalaciones de nuevas naves encaminadas a producir y desarrollar materias derivadas del PVC, que empezaban a irrumpir en los mercados como aislantes de cables.
En 1988 Conductores Eléctricos Roqué pasa a formar parte, junto con las compañías General Cable, Saenger, Conductores Eléctricos Navarro, Plasmica, Cables de comunicaciones y Cablinsa de la nueva compañía denominada General Cable Compañía S.A., con la finalidad de aprovechar las sinergias, mejorar el nivel de servicio y la calidad del producto. La operación, que financieramente se realizó como un Management Buy Out, (compra por parte de los propios directivos de las compañías implicadas), dio también participación nuevamente al grupo británico BICC Cables.
En el año 1996, BICC Cables adquiere el 100% de las acciones pasando a denominarse BICC General Cable.
En el año 1999, BICC General Cable, forma parte de BICC General, una nueva compañía que nace de combinar las capacidades de dos grandes fabricantes mundiales de cables: General Cable Corporation y BICC Cables. BICC General, se convierte la tercera mayor compañía de cable del mundo, cuenta con 39 instalaciones de fabricación situadas en todo Estados Unidos, Peninsula Ibérica, y Oceanía y una amplia gama de productos: desde cables para el sector de transporte y distribución de energía eléctrica, para señalización, mando y control, hasta cables de datos y telecomunicaciones. Con más de 13.000 empleados en todo el mundo, BICC General cuenta con una presencia fuerte en todo el mundo. En España y América del Sur, opera a través de BICC General Cable. BICC General Cable es el primer y mayor fabricante de cables eléctricos de España, con una producción entorno a las 70 mil toneladas de cable al año. La especialización de sus plantas de producción en función de los productos, asegura que existe una plataforma intensificada para el desarrollo del producto y de los procesos que están enfocados a la satisfacción de las necesidades del cliente.
La planta situada en Manlleu C/ Rusiñol, dispone de 6.308.560 metros cuadrados de superficie, de los cuales 35.182 metros están edificados. En el año 2000 ha sido ampliada mediante la adquisición de los terrenos que en su día pertenecieron a la Empresa Platt Saco Lowel y en la actualidad dispone de una superficie de mas de 100.000 metros cuadrados.